Después de las vacaciones de Navidad, toca volver a la rutina, lo que supone enfrentarnos, quizás, con trabajo atrasado y decenas de obligaciones por afrontar. En enero, son muchos los que tienen como propósito hacer más deporte, pero con un panorama así ¿cómo ponerse en forma si el tiempo es limitado? La solución puede ser una cinta de correr doméstica, que te permitirá mantener tu forma física sin tener que desplazarte a ningún lugar. Puedes usarla tanto después del trabajo como durante el mismo. ¿Durante la jornada laboral? Sí, has leído bien. Te contamos cómo.
Por qué una cinta de correr es la mejor opción en invierno
En invierno las bajas temperaturas hacen que tengamos luchas internas acerca de la necesidad de hacer ejercicio y las pocas ganas de salir a la calle. Si a eso le sumamos las obligaciones del día a día, ¡verdaderamente se hace muy complicado encontrar un espacio para mantenernos en forma! Pero si quieres hacer ejercicio y obviar la parte de abrigarte y desplazarte hasta el gimnasio, una cinta de correr se convierte en la mejor idea. Y es que ¡tu mecanismo de entrenamiento estará a solo unos pasos de ti!
Se acabó, por tanto, la pereza de salir con frío bajo la lluvia y las heladas. Solo tienes que encontrar el mejor lugar para instalar tu cinta de correr en casa. Prepara también una botella de agua y la lista de reproducción que te motiva a esforzarte al máximo. ¡Así da gusto entrenar!
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Mejores entrenamientos con tu cinta de correr
¡Llegó el momento de atarse las zapatillas y prepararse para mantenerse en forma! Sin duda, las cintas de correr te ayudarán en tus ejercicios cardiovasculares. Su versatilidad hará que no te aburras nunca de ellas, pues permiten variar las sesiones fitness. Estos son algunos de los entrenamientos que puedes hacer.
1. Correr a intervalos
Uno de los entrenamientos más efectivos sobre todo para quemar calorías es correr a intervalos. Esto supone alternar el ritmo de la sesión por momentos, de manera que ayude a acelerar tu metabolismo. Un ejemplo de esta opción sería: calentar durante 5 minutos a un ritmo cómodo, correr casi a máxima capacidad durante 1 minuto, caminar a un ritmo medio después y repetir varias veces la serie.
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2. Correr para aumentar la resistencia
Una de las sesiones más típicas sobre una cinta es correr durante determinado tiempo a un ritmo constante. Puedes calentar durante 5 minutos y, posteriormente, establecer una velocidad que te permita mantenerte en la carrera al menos durante 45 minutos. Después, vete enfriando poco a poco con un ritmo más lento, pero no pares de golpe.
3. Hacer marchas
Para quienes buscan un ritmo algo más rápido que una simple caminata, pero no quieren correr, las marchas son la mejor opción. Esta clase de entrenamiento es lo que comúnmente se conoce como “andar rápido” y supone encontrar un ritmo cómodo pero que, al mismo tiempo, ayude a aumentar las pulsaciones. Intenta resistir entre 45 minutos y 1 hora.
4. Explorar los programas
Usualmente las cintas de correr cuentan con programas predefinidos para ayudarte a variar las sesiones. Hay algunos muy intensos que intercalan unos pocos minutos de ritmo medio con otro periodo de sobreesfuerzo para poner tu corazón a funcionar. Prueba con estos programas hasta identificar el que mejor va contigo.
5. Caminar mientras trabajas
¿Caminar mientras trabajas? ¡Por supuesto! Es una manera de ejercitarte mientras estás al frente de tus responsabilidades. En este caso, puedes escoger un ritmo lento que te permita enfocarte en tus tareas y en la pantalla del ordenador mientras caminas y contribuyes a que tus músculos y articulaciones estén en movimiento.
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Cintas de caminar para ejercitarse en el trabajo
Si te ha parecido interesante aquello de mantenerte en forma mientras estás trabajando, es posible que te apetezca saber más sobre cómo usar estas cintas de caminar para tu home office. Al contrario que las convencionales, este tipo de cintas apenas ocupan espacio y no son nada voluminosas, pues están diseñadas para usar y guardar según las necesidades.
Solo necesitas colocar la cinta debajo de tu mesa de trabajo y ajustar la velocidad. ¡Muy sencillo! Por ejemplo, nuestra cinta de caminar para escritorio GP01 ofrece seis modos de ajuste de velocidad para que escojas el más conveniente para tu tiempo de trabajo. Se trata de un dispositivo estable y, muy importante, silencioso, por lo que no sufrirás distracciones. Con una capacidad de carga de 120 kg, incorpora también funciones de inclinación y diseño de absorción de impactos, de modo que no tendrás que preocuparte de dañar el suelo. --altImgStart--{"link":"https://image.springbeetle.eu/cdn-cgi/image/dpr=1,format=webp,fit=pad/https://cnmegk4mhxmt.compat.objectstorage.eu-frankfurt-1.oraclecloud.com/prod-eu-s3/trantor/attachments/ES/GP01B-scenery-1.png","alt":"GP01"}--altImgEnd--
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En conclusión
¡Las cintas para caminar de escritorio están llamadas a revolucionar la manera en la que trabajamos! Se acabó el sedentarismo durante la jornada laboral. Descubre más sobre estos artículos en nuestro sitio web.