La desorganización puede reinar también en el universo digital, no solo en el plano físico. Nuestras vidas cada vez más digitalizadas van acumulando archivos, imágenes y demás elementos en el mundo virtual que van generando un desorden y, por qué no, un espacio inútil que se hace preciso ordenar. En el artículo de hoy, te hablamos de cómo poner orden en el desorden digital a través de soluciones prácticas y efectivas. Recuerda que un estilo de vida ordenado se traduce en un mayor bienestar y paz mental.
En el plano físico, las soluciones de almacenamiento y organización son clave a la hora de poner orden a nuestros enseres materiales. Recurrimos a armarios, cajones y demás artículos para organizar nuestras prendas de ropa, zapatos, libros, etc. En el plano virtual, hay que recurrir a herramientas y estrategias digitales. Veamos cómo. --altImgStart--{"link":"https://image.springbeetle.eu/cdn-cgi/image/dpr=1,format=webp,fit=pad/https://cnmegk4mhxmt.compat.objectstorage.eu-frankfurt-1.oraclecloud.com/prod-eu-s3/trantor/attachments/ES/CB312%20%E5%84%BF%E7%AB%A5_Camera013_0000.jpg","alt":"Armario de almacenamiento BK2-S"}--altImgEnd--
1. Revisa todos tus documentos
El primer paso para organizar tu desorden digital es, quizás, el más arduo de todos. Además, deberás dedicarle bastante tiempo. Siéntate, enciende tu ordenador y comienza a revisar todos tus archivos. En la carpeta de las “imágenes” es donde solemos acumular más elementos a los que quizás no estamos dando nada de uso. ¿Y es que piensas continuar manteniendo tus 500 fotografías de las últimas vacaciones en la playa? Es el momento de examinar carpeta por carpeta y eliminar todo aquello que, siendo sensatos, no vamos a necesitar más.
2. Organiza los archivos en categorías
Tras revisar todos los archivos, es el momento de pasar a la organización real. No recurras a depositarlos en la carpeta “documentos” porque esta es muy general. En su lugar, puedes aprovechar para hacer subcarpetas y, de este modo, tener todo mucho más ordenado. Pero, además, te facilitará la posterior identificación del archivo. En cualquier fase del proceso de organización seguro que vuelves a encontrar documentos que son susceptibles de ser eliminados porque ya no hacen falta.
3. Utiliza nombres descriptivos en las carpetas
¿Qué es eso de nombrar un archivo como “archivo 3” o “copia de archivo 5”? Este tipo de denominaciones no te va a ayudar en absoluto a encontrar un tiempo después lo que estás buscando exactamente. En su lugar, emplea nombres descriptivos que vayan al grano como “imágenes de 2020”, “grupos de rock”, etc.
4. Recurre a los sistemas de almacenamiento portátil
En el caso de aquellos archivos que planeas no usar muy a menudo, puedes recurrir a los discos duros portátiles y otros sistemas de almacenamiento extra. Estos dispositivos son perfectos para almacenar imágenes que usualmente no necesitas consultar, pero sabes que están ahí para cuando te entre la nostalgia de revisar ese gran viaje que hiciste hace algunos años. Otra ventaja de echar mano de estos dispositivos es que funcionan como copias de seguridad, de manera que te aseguras de que son archivos que puedes recuperar cuando te apetezca.
5. No temas eliminate documentos
Aunque ya nos hemos referido a esta recomendación, no está de más hacer hincapié en ella. Seguro que hay imágenes borrosas que ¿para qué conservarlas? También es posible que, al hacer la revisión, te encuentres archivos duplicados. ¡A la papelera de reciclaje! Incluso puede que te topes con borradores que, una vez el trabajo está terminado, ya no te van a hacer falta.
6. Mantén los archivos que te hacen feliz
En esta lista de consejos para organizar el desorden digital nos hemos centrado en la “utilidad” de los archivos como requisito para conservarlos y no borrarlos. Pues bien, es justo que hagamos una excepción y, por ello, te sugerimos mantener todos aquellos archivos que, de una u otra forma, tienen un valor sentimental para ti. Si hay algún documento que en realidad sabes que no necesitas para nada, pero te gusta regresar a él cada cierto tiempo, consérvalo. Es posible que en un tiempo lo borres porque consideres que su tiempo ya pasó, pero hasta entonces quizás te interese guardarlo.
7. Haz limpieza de tus correos electrónicos
Un rincón que suele acumular mucho “polvo” es nuestra bandeja del correo electrónico. ¿Llevas con tu misma cuenta desde tiempos inmemoriales? Entonces, es más que probable que precise una limpieza en profundidad. No cabe duda de que vas a necesitar tiempo para esta tarea, pero te sentirás mucho mejor al comprobar que tu bandeja de entrada luce diáfana.
8. Organiza tu escritorio
Una última recomendación que te ayudará a no desquiciarte con el desorden es limpiar tu escritorio. Este es el escaparate de tu ordenador, lo primero que verás al acceder, así que procura que no luzca muy cargado. No lo dudes: deshazte de todos los accesos directos y carpetas que no tienen que estar ahí.
¡Ordena tu vida digital y sentirás tu vida física mucho más en calma! La organización, en el plano que sea, siempre es aliada de tu bienestar y tranquilidad.