¿Te resistes a renovar tu silla de oficina? Aunque en el fondo conoces de sobra las ventajas de incorporar una silla ergonómica a tu jornada laboral, es posible que no termines de decidirte. Conocemos esa sensación y, sobre todo, esas excusas para no dar de una vez por todas el paso. ¡Seguro que tienes miles de preguntas en tu cabeza que están bloqueando esta inversión!
Dudas más comunes que te impiden comprar una silla ergonómica
Tienes claro que tu silla de trabajo está próxima a jubilarse, pero incluso así no te animas a comprar una silla ergonómica nueva que, por fin, te brinde una experiencia de trabajo más cómoda. Estas son las razones que, seguro, están rondando tu cabeza en estos momentos para no comprar de una vez esa silla de oficina que necesitas.
1. ¿Las sillas ergonómicas no son una moda pasajera?
Es posible que pienses que las sillas ergonómicas están de moda y que esta tendencia pasará en algún momento. ¡Nada de eso! ¿Es acaso preocuparse por la salud una moda pasajera? Las sillas ergonómicas han sido diseñadas pensando precisamente en el bienestar de los usuarios y, por este motivo, incluyen características únicas que evitan lesiones y favorecen una postura más natural y saludable delante de la pantalla del ordenador. --altImgStart--{"link":"https://images.pexels.com/photos/8111799/pexels-photo-8111799.jpeg?auto=compress&cs=tinysrgb&w=1260&h=750&dpr=1"}--altImgEnd--
2. ¿Son realmente tan cómodas? ¿Cómo puedo saberlo?
Esta duda suele ser un motivo habitual para no comprar una silla ergonómica. Y es que mucha gente no piensa que en realidad son asientos tan cómodos. Solo tienes que consultar las características detalladas del modelo en cuestión y, si no acaban de convencerte, nada mejor que conocer la experiencia de otros usuarios. Incluso, si compras online, siempre puedes pedirla y probarla, sabiendo de antemano que si no te gusta, podrás devolverla.
3. ¿Son en realidad tan duraderas?
La calidad de los materiales de fabricación y otros aspectos como la capacidad de carga pueden darte una idea de si la silla en cuestión te acompañará varios años. Fíjate también en otros detalles como la garantía de compra. Por ejemplo, la silla ergonómica BS14 ofrece una garantía de 5 años, lo que puede darte una idea de su durabilidad. Así que sí, ¡no son sillas fabricadas al uso, están hechas para durar!
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4. ¿Me puedo fiar del fabricante?
Otro de los motivos para no adquirir una silla con características ergonómicas es que no conocemos al fabricante. No obstante, es tan sencillo como investigar un poco la trayectoria de la marca y, sobre todo, los certificados de calidad del artículo en cuestión. De nuevo, fíate de elementos como la garantía de compra. Los fabricantes de confianza te ofrecerán un periodo de garantía mayor a la media del mercado.
5. ¿Encajarán en mi espacio de trabajo?
Otra duda habitual tiene que ver con la adaptación de la silla ergonómica a nuestro espacio de trabajo u home office. La buena noticia es que estos asientos suelen tener características ajustables, tanto en lo que respecta a la altura de la silla como a la profundidad, por ejemplo. Esto significa que, sin duda, encajarán bien con el escritorio de nuestro despacho. Por ejemplo, silla ergonómica BS14 permite ajustar elementos como la altura del asiento, pero también los reposabrazos y el ángulo de inclinación.
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6. ¿Serán difíciles de montar?
Hay usuarios que se abruman ante la idea de recibir un mueble y tener que montarlo. En el caso de las sillas ergonómicas, normalmente la instalación no representa demasiada complicación. Estas suelen acompañarse de manuales de instrucciones e, incluso, el fabricante usualmente ofrece un servicio de atención al cliente para resolver este tipo de cuestiones. La mayoría de personas no tardará más de 20 minutos en montar su silla nueva.
7. ¿En realidad necesito una silla nueva?
Ante la idea de comprar una silla nueva, es normal que nos echemos atrás con este tipo de pensamientos. Está claro que realizar cierta inversión puede asustar en un principio, pero en cuanto conozcamos los beneficios se nos disiparán las dudas de golpe. Una silla ergonómica está preparada para favorecer una postura más saludable y se encarga de aliviar los dolores de espalda, cuello y lumbares tan típicos de pasar mucho tiempo sentado. Si cada vez te cuesta más trabajo llegar al final de la jornada laboral a causa de la incomodidad, déjanos decirte que ¡sí necesitas una silla nueva!
8. ¿No son muy caras?
Es obvio que el precio es un factor de compra a considerar seriamente. También está claro que una silla ergonómica cuenta con características únicas e innovadoras que no tiene cualquier asiento convencional, de ahí que su precio resulte algo mayor.
Conclusión
¡Ha llegado el momento de cambiar de silla! En FlexiSpot te acompañamos en el proceso de compra para ayudarte a elegir el modelo más apropiado para tus intereses. ¡Consulta nuestro catálogo!