Un escritorio evolutivo es una gran inversión en mobiliario infantil, puesto que crece con él y se puede utilizar durante muchos años. Por esto, aunque su precio sea más elevado que el de un escritorio sencillo, hay que tener en cuenta que este mueble se irá adaptando al niño.
Se trata de una mesa regulable en diferentes niveles para poder hacer los deberes u otras actividades en ella. Su objetivo es que el niño mantenga siempre una postura correcta y ergonómica. Según se va desarrollando su fisionomía, éste escritorio se va colocando a un nivel más alto, para que su espalda se sitúe de forma natural sin tener que separarse del respaldo de la silla o tener una postura forzada o incómoda.
Los escritorios evolutivos se pueden considerar un tipo de mobiliario multifuncional, ya que sirven tanto para trabajar y realizar tareas como para jugar.
Ventajas de tener un escritorio evolutivo
Además de que, como ya hemos dicho, un escritorio evolutivo se adapta al crecimiento y evolución física del niño, tiene otras muchas ventajas, tales como:
- Favorecer la movilidad corporal y la libertad de expresión, adaptándose a cada etapa.
- Son multifuncionales.
- Crean una disposición positiva hacia el aprendizaje, aumentando la creatividad y el desarrollo de la imaginación.
- Son mucho más cómodos y adecuados que el mobiliario enfocado para adultos.
- Facilitan la escritura, el dibujo y la estimulación de la motricidad fina.
- También ayudan a establecer hábitos y rutinas, convirtiéndose en un espacio de trabajo confortable y seguro.
¿Cómo debería ser el escritorio evolutivo?
Es necesario que se trate de un lugar cómodo y funcional. Aunque hay que darle mayor importancia a la ergonomía del mismo, también hay que tener en cuenta su diseño, ya que la estética del mismo puede influir mucho en la receptividad del niño para realizar en él sus tareas. Además, visualmente ocupa un gran espacio en una habitación infantil, por lo que su diseño debe asemejarse al resto de muebles para no desentonar en la decoración. Lo ideal es que tenga una forma atractiva que potencie la imaginación de los más pequeños.
Para cualquier mueble que coloquemos en una habitación infantil debemos priorizar el uso de aquellos que están fabricados en base a materiales naturales. Además de aptos para los niños, los muebles respetuosos con el medio ambiente son la mejor opción, como por ejemplo la madera de pino, que tiene una gran elasticidad y resistencia. Es recomendable asimismo evitar los muebles barnizados, porque pueden contener sustancias tóxicas.
Principales elementos de un escritorio evolutivo
Dado que el escritorio evolutivo va a acompañar a los niños durante diferentes etapas de su crecimiento, debemos valorar bien que escritorio comprar y revisar diferentes opciones, ya que en el mercado nos podemos abrumar con las diferentes ofertas que encontraremos.
Para arrojar un poco de claridad sobre cómo tomar la mejor decisión, vamos a analizar cuáles son los elementos básicos de un escritorio de este tipo y en qué tenemos que fijarnos para valorar su calidad.
Instrucciones claras de montaje
Por lo general, no solemos fijarnos demasiado en las instrucciones de montaje. Esto se debe a diversos motivos, bien porque se trata de un mueble sencillo de instalar, bien porque contratamos el servicio de montaje o tenemos a alguien de confianza que nos puede ayudar. Además, una vez que el mueble está montado y bien colocado nos olvidamos de esta cuestión.
Sin embargo, en los escritorios evolutivos debemos tener en cuenta que, para que éstos evolucionen con el niño, su altura se debe ir regulando en diferentes etapas. Por tanto, tenemos que tener muy claro cómo se hace para que no se desacoplen los tableros ni lo montemos de forma incorrecta. Lo ideal es que el escritorio tenga un mecanismo de ajuste sencillo.
Tablero inclinable
Aunque no todos los escritorios disponen de él, contar con un tablero que se pueda reclinar hacia delante permite que el niño trabaje en una posición más ergonómica, gracias a que tiene que esforzarse menos para mantener la espalda apoyada en el respaldo de forma natural.
Patas
Lo más común tanto en mesas como en escritorios es que estos tengan cuatro patas iguales. Sin embargo, los escritorios evolutivos, aunque los hay de cuatro patas, algunos de ellos cuentan con dos soportes anchos que actúan como pilares, situados uno en cada extremo. Lo más importante, sean de dos o cuatro patas, es que las piernas tengan el suficiente espacio para estar tanto recogidas como estiradas.
Otros aspectos importantes a analizar en la búsqueda del escritorio perfecto son que éste, al igual que en la mayoría de muebles para niños deberíamos buscar, es que tenga las esquinas redondeadas, para que no haya salientes puntiagudos con los que hacerse daño; y que cuente con complementos como cajones donde guardar material y otros accesorios de uso escolar.
Por último, si estamos pensando en comprar un escritorio con altura regulable, lo lógico es plantearnos también la compra de una silla regulable, que pueda adaptar la posición de su asiento a la altura del escritorio, ya que, de lo contrario, tendremos que ir cambiando de silla según crezca el niño.