Trabajar en remoto no supone, en principio, una mayor comodidad que trabajar en una oficina. Y es que puede ocurrir que las condiciones en las que trabajes sean peores que las que tendrías si fueras a la oficina, entorno laboral en el que se suelen cuidar más los detalles. Aunque parezca que el teletrabajo puede realizarse de cualquier manera, no es así. En el artículo de hoy, te hablaremos de la importancia del confort para trabajar en remoto.
Si los expertos en ergonomía pudieran mirarnos a muchos de nosotros cómo trabajamos, quizás se echarían las manos a la cabeza. No en vano, ¿quién no ha trabajado alguna vez echado en el sofá, tumbado en la cama o sentado en una silla incómoda en la mesa de la cocina? Desde luego, estas no son las condiciones ideales para trabajar. Trabajar en casa es un gustazo siempre y cuando el entorno laboral reúna ciertos aspectos básicos. --altImgStart--{"link":"https://images.pexels.com/photos/12663049/pexels-photo-12663049.jpeg?auto=compress&cs=tinysrgb&w=1260&h=750&dpr=1"}--altImgEnd--
Auge de molestias y dolor en las cervicales y espalda
Desde que el teletrabajo se “ha puesto de moda”, parece que los profesionales de la salud han notado un incremento de pacientes en consulta con problemas relacionados con el dolor de las cervicales y espalda. No es de extrañar, pues lo cierto es que muchas veces trabajamos de cualquier manera sin pensar en las consecuencias que esto puede traer a nuestra salud.
Pero además de que el uso de ordenadores portátiles y mobiliario no adecuados para trabajar repercuta en nuestra salud física, también puede hacer mella en nuestra salud mental. Existe una relación estrecha entre el confort y la productividad. Es muy difícil ser eficiente a la hora de abordar tus tareas si no estás cómodo en la silla de trabajo, si te duele la espalda o si tienes los ojos cansados después de horas frente a una pantalla.
Este impacto negativo en la salud, por supuesto, puede afectarte anímicamente. Sentirte cansado o dolorido puede hacer que no te encuentres en tus máximos.
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Es hora de evaluar tu ‘home office’
En este punto, es importante que te asegures de que tu home office te está brindando ese confort necesario para desempeñar tu trabajo en el día a día. Es el momento de evaluar cada aspecto de tu espacio laboral. Echa un vistazo a tu alrededor y examina:
Si el mobiliario es el apropiado
¿Te sientas cada día a trabajar en una silla dura y cero ergonómica? ¿Tu silla no es ajustable y es demasiado rígida? Fijémonos en la mesa: ¿está a la altura adecuada? ¿Ofrece el suficiente espacio para desplegar todos tus útiles de trabajo?
Si el espacio anima a trabajar
Está claro que trabajar es una obligación, pero ¿te sientes a gusto en tu oficina en casa? ¿Tienes un espacio designado para enfocarte en tus tareas o por el contrario estás en un rincón del hogar sin apenas luz, atestado de cosas y en un área de reducido tamaño? Reconsidera estas cuestiones.
Si el nivel de ruido es bajo
Para concentrarte y estar cómodo en tu lugar de trabajo, es preciso que cumpla una serie de requisitos en lo que respecta al sonido. Un exceso de ruido puede hacer que estés irritado todo el día y, por tanto, puede afectar a tu productividad.
Si la luz es suficiente
Trabajar en un entorno con luz natural es lo idóneo. Si no es posible, al menos asegúrate de que la luz artificial es suficiente como para que tu vista no se resienta demasiado. Trabajar en un lugar oscuro afecta a tu salud visual y anímica.
Encuentra confort en los muebles de oficina
En uno de los epígrafes anteriores ya señalamos la importancia de disponer de mobiliario de oficina apropiado. He aquí unas cuantas propuestas que te regalarán el confort que necesitas.
Un escritorio cómodo para trabajar
¿Qué debe tener una mesa de trabajo? Por ejemplo, que sea amplia, que sea regulable en altura (no es esencial, pero ayuda) y que optimice el espacio gracias a accesorios de gestión de cables, por ejemplo. Una buena idea es el escritorio elevable E7 Pro, que puede regularse en una altura de 63,5 a 128,5 cm.
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La silla ergonómica que te mereces
Si trabajas en remoto, seguro que pasas buena parte de tu día sentado y sin apenas moverte. Por ello, necesitas una silla ergonómica que te brinde el soporte que necesitas, que sea ajustable y resistente. Un buen ejemplo es la silla ergonómica BS11 Pro. Y si buscas un asiento todo en uno, que también te regale momentos de relax, prueba con la silla de oficina de alta calidad C7, que permite varias posiciones de asiento.
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En conclusión
¿Por qué el confort es clave para trabajar en remoto? Porque si estás pleno mentalmente, tu productividad y creatividad se verán favorecidas, pero también te permitirá sentirte más satisfecho y motivado. En FlexiSpot te ayudamos a que así sea.
