Con una configuración de monitor dual, cada vez más popular para el trabajo y el ocio, es importante lograr el equilibrio adecuado entre visibilidad y salud ocular. Y ahora todos sabemos que siempre debemos mantener el cuello recto para evitar la tensión al usar monitores. Pero, ¿cómo ponemos en práctica estos conceptos cuando parece que multiplicar los monitores maximiza la complicación? Veamos los conceptos básicos, y luego hagámoslo fácil para añadir la cantidad de pantallas que necesites.
Configuración de un único monitor
Primero, cubriremos los conceptos básicos de cómo se debe configurar un solo monitor para una posición ergonómica adecuada y una buena salud ocular. El monitor debe colocarse directamente frente a ti, aproximadamente a un brazo de distancia. La altura correcta del monitor coloca la parte superior de la pantalla a la altura de los ojos cuando te sientas derecho y miras directamente hacia adelante. (Si usas lentes bifocales, trifocales o progresivas, el monitor debe colocarse un poco más bajo para tener en cuenta el uso de las lentes).
Configuración de monitor dual
Cada vez más, los usuarios de computadoras añaden segundos monitores a las configuraciones de sus escritorios para facilitar el cambio de tareas y la comparación entre varios archivos. Incluso para pantallas individuales, los brazos para monitor pueden ser una gran solución para colocar los monitores a la altura y distancia correctas, pero los brazos para varios monitores son particularmente útiles al usar dos monitores como ahorro de espacio en el escritorio. Ten en cuenta que existen diferentes escenarios para el uso de dos monitores, así que imagina tu flujo de trabajo y determina qué posicionamiento tiene más sentido para tus actividades principales.
Si ambos monitores se usan casi por igual, por ejemplo, cuando los diseñadores gráficos usan varios programas simultáneamente, deben colocarse lo más juntos posible, preferiblemente tocándose, centrados directamente de frente. Para hacer que el espacio entre los monitores y tú sea más uniforme (optimizando la distancia focal), inclínalo ligeramente para que los bordes exteriores estén más cerca de ti que los bordes interiores que se tocan. Los monitores aún deben estar a la distancia de un brazo, a una distancia de entre 45-70 cm. Al igual que con la configuración de un solo monitor, las partes superiores deben estar a la altura de los ojos.
Si ves que ocasionalmente trabajas durante períodos más largos en un monitor que en el otro en este escenario, gira la silla para mirar hacia ese monitor en lugar de girar la cabeza, y por lo tanto, forzar el cuello. El teclado y el ratón también deben estar inclinados hacia ese monitor mientras trabajas para evitar tensión en las muñecas y los brazos.
Alternativamente, si un monitor de tu configuración de monitor dual es el principal, por ejemplo, si deseas usar uno para proyectos activos pero vigilar el correo electrónico entrante en el otro, coloca el monitor principal como lo harías con un solo monitor, centrado directamente frente a ti. Coloca el monitor secundario junto al principal, a la misma altura y distancia, pero gira el borde exterior ligeramente hacia ti para que toda la pantalla quede aproximadamente a la misma distancia. De manera similar a la configuración de un único monitor, inclina el teclado y el ratón hacia cada monitor cuando lo uses.
¿Te interesa un truco para maximizar la salud visual y la comodidad? Coloca el monitor secundario en el lado de tu ojo dominante. Si no estás seguro de cuál es ese ojo, escoge un pequeño objeto inmóvil a unos 6 m de distancia, tal vez un interruptor de luz o un picaporte. Crea una forma de diamante con los dedos pulgar e índice, o un pequeño "túnel" para mirar a través de él con una mano. Concéntrate en el objeto mientras miras a través de las manos, luego cierra un ojo a la vez. Cuando uno de los ojos se cierra, el objeto desaparecerá parcial o completamente de la vista. El ojo que todavía ve el objeto por sí mismo es tu ojo dominante.
Configuración de monitor triple (¡o más!)
A menudo, se utilizan configuraciones de monitores triples o incluso más para juegos de PC para mostrar una vista más amplia del mundo virtual. Sin embargo, también hay profesiones que requieren tres o más monitores; por ejemplo, los radiólogos a menudo instalan dos monitores verticales como foco principal para ver los exámenes y usan un tercer monitor horizontal a un lado para acceder a información administrativa o cambiar entre exámenes. Afortunadamente, es fácil aplicar las reglas que hemos aprendido hasta ahora para la colocación adecuada de monitores adicionales: centrar lo que se usa con más frecuencia y crear una forma ligeramente cóncava alrededor para mantener la distancia focal igual entre todos los monitores. De nuevo, los brazos para monitor pueden ayudar a hacer posible la configuración perfecta de la pantalla al ahorrar espacio en el escritorio y permitir la flexibilidad para el posicionamiento horizontal o vertical del monitor. Usa un brazo doble junto con un solo brazo para la configuración de tres monitores, o sigue añadiendo brazos según sea necesario.
Equipado con equipos personalizables y con las pautas para la ergonomía en cuanto a la ubicación del monitor, puedes crear tu estación de trabajo ideal para mejorar la comodidad y la productividad. Tu único límite es tu presupuesto para monitores... ¡y quizás el tamaño de tu oficina!